Olvidé contar


Ø Dime, por favor, ¿por qué lo hiciste?

Ø La verdad es que tenía que, una necesidad latente no me dejaba en paz ya semanas atrás. Sabía que era la única solución. Claro que esta solución era, a fin de cuentas, para mí, porque, ¿de qué manera podría serlo para ella? No es que seamos inmortales, pero creo que a veces es mejor conocer el momento exacto y más que todo, el porqué. Sólo de esta forma podría saber por qué vivió.

Ø ¿En serio crees que es eso lo mejor? Me refiero a que para ti sí, ¿pero cómo podías saberlo para ella?

Ø Creía que esto ya lo habíamos discutido antes. ¿Tanto le cuesta comprender acaso que yo la sabía mejor que nadie? Siempre me lo mencionó, nunca la tomé en serio, sólo reía porque yo pensaba diferente. Es ahora que años después llegué a comprenderla completamente, ahora sé a qué se refería.

Ø Entonces, ¿era eso lo que ella quería?

Ø Entienda que para ella no era la persona que se lo revelaba. Era sólo el hecho de la revelación misma. No lloró, no se asustó, ni siquiera tuvo dolor, supo cómo aceptarlo. Y le cuento esto para que sepa, porque sé que ninguna necropsia podría decirle esto.

Ø ¿No quisieras entonces saber?

Ø ¿Qué cosa?

Ø Lo mismo que ella supo.

Ø Comprenderla a ella no significa que adopte lo que ella creía. Nunca me gustó esa idea para mí.

Ø Sin embargo, ¿crees que deberías estar aquí?

Ø No lo sé. Ustedes han querido eso. Ahora sin ella, no me dan tantas ganas de salir de aquí, ahora no tiene importancia, sólo espero el tiempo que ella me entregó. El problema es que aquí parece haberse detenido. Son pocas las noticias recalentadas que me llegan de afuera.

Ø Nosotros no hemos querido eso. Se ha decidido por medio del estudio de tus acciones.

Ø ¿Entonces debo decir que estoy loco para salir de aquí? ¿Pero no se dan cuenta que no puedo decirlo? Siquiera mencionarlo implica que debo quedarme aquí, aunque eso sea lo más sano.

Ø No, claro que no, estás confundido.

Ø No insista por favor… déjeme hacerle una pregunta.

Ø Por supuesto.

Ø ¿Cómo es todo ahora?

Ø ¿Todo?

Ø Sí, ¿continúa la vida?

Ø Claro que sí, pero se nos ha terminado el tiempo. Hablaremos de eso en ocho días.

Ø Por supuesto, por supuesto… es sólo que he olvidado contar.


(Se escucha un portazo y las luces se apagan, switch)

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